Este libro trata de las identidades que se construyeron en México a lo largo de los tres siglos virreinales y que se concretaron en las varias patrias creadas tanto por los criollos como por los indígenas, La palabra patria, tan traída y llevada en este año de los festejos de los centenarios, no fue por tanto un término acuñado en el siglo XIX. Sus connotaciones se remontan al mundo romano y en la cultura occidental, y en particular en la hispánica, se vinculó con el terruño, con la ciudad donde se había nacido o que se había adoptado como propia. Aunque la primera ciudad que forjó una identidad patriótica desde muy temprano fue la ciudad de México, varias urbes criollas e indígenas también se enorgullecieron de sus escudos, de sus hombres y mujeres célebres, de sus edificios y de sus instituciones.