Pedro Novoa incursiona en la creación de cuentos para niños y lo hace por todo lo alto. Sus historias son atractivas, graciosas, inesperadas, tiernas, sensibles, dan cuenta de la perfección del universo creado merced a la fantasía del autor. En estas páginas se llevarán a cabo el sueño imposible de un ogro feísimo y una bella princesa, ambos solitarios, que descubren el amor; una palomita construye la fortaleza de su sentimiento; una gaviota se enamora de manera imposible de un pececillo, entre otras cual perfectas fábulas donde las frutas y los animales adquieren vida propia, y en esa transfiguración son seres que luchan contra la soledad, el desamor, los infortunios de la vida y la sinrazón de la existencia. Amor de ogro, es una muestra de esa interminable naturaleza creativa, una suerte de entrañable sublevación contra lo establecido en cuanto se ha escrito para la imaginación infantil.