Desde la más remota antigüedad, el Perú es un país de artesanos. Hoy esa herencia se expresa en las habilidades que dan forma a casi veinte mil tipos diferenciados de piezas, en cuarenta géneros distintos. Pocos son los pueblos de este país que no puedan aportar alguna especialidad, algún matiz local a nuestra rica artesanía. Como testimonio de una tradición o como prueba de una intensa inventiva contemporánea, los objetos artesanales del Perú, en su variedad y belleza representan y encarnan la existencia de un genio particular de estas tierras. (100)