Editorial(es): Centro Cultural José Pío Aza
Lugar de publicación: Lima
Año de edición: 2011
Número de páginas: 250
¿Qué aporte nos proporcionan los griegos sobre nuestra identidad y reconocimiento? ¿Qué nos ha permitido obtener esta relectura posmoderna del Edipo rey y la Antígona de Sófocles? Es la mirada sobre nuestra corporeidad: cuerpos re-conocidos, que nos dicen su verdad, que devuelven la memoria de quiénes somos y que nos reinstalan en la conciencia de nosotros mismos; cuerpos reconocidos como detentadores y exigentes de derechos, que se performan incluso más allá de la muerte, religándonos en la solidaridad de nuestra propia humanidad; cuerpos que nos identifican, cuerpos que nos transforman. Podemos ser Edipo o Antígona, o Tiresias, Hemón, Creonte o Ismene; parafraseando a Mario Vargas Llosa: ¡Qué extraordinario privilegio el de unos seres que no tienen identidad porque las tienen todas!