Martina, una niña de cuatro o cinco años, se enfrenta resueltamente a sus temores y sale airosa. La historia se inicia cuando ha llegado la hora de dormir. Cada noche Martina le pide a su mamá que la acompañe un rato, porque le da un poco de miedo la oscuridad. Esta noche, sin embargo, Martina está por descubrir que con un poco de imaginación no hay por qué tenerle miedo a la oscuridad. Cuento magistralmente ilustrado por el artista plástico Gabriel Alayza.