Rosa María publica Asesinas
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Fuente: Correo, Lima 27/11/08
http://www.correoperu.com.pe/lima_nota.php?id=78992&ed=14
Rosa María Cifuentes ha reconstruido, a partir de testimonios de familiares, expedientes judiciales, partes de necropsia y recortes periodísticos, las complejas y oscuras travesías vitales que condujeron a un grupo de mujeres peruanas, de distinta condición social y geográfica, a consumar el mayor delito posible: el asesinato. Gracias a la editorial Mesa Redonda -que inaugura su serie de No Ficción-, Cifuentes plasma aquellas historias en Asesinas: Mujeres que matan en el Perú por odio, vergüenza, miedo o poder, un libro tan intenso como revelador.
Correo: ¿Cómo se origina este libro?
Rosa María Cifuentes: Yo fui recopilando las historias porque siempre he coleccionado material hemerográfico e histórico. Y en el año 1997 tuve en mis manos mucho archivo hemerográfico de revistas y periódicos sobre homicidios de todo tipo y me di cuenta que los casos de mujeres no eran muy tomados en cuenta y comencé a guardarlos. Porque sobre todo no eran muy comunes bajo modalidades de mucha violencia. La mayoría de mujeres peruanas asesina de manera muy artesanal. O es con veneno o con cuchillo. Sin embargo, pude encontrar casos bastante interesantes. En el libro está, por ejemplo, la historia de una mujer que en la Sierra llegó a cocinar a su hijo. Y es que con el tiempo fui realizando varios viajes y fui armando más historias.
C: ... y luego decides contarlas a través de la crónica.
RMC: Decido contarlos a través de la crónica para tratar que la crónica policial recupere el sitial que ha perdido en los periódicos. Hoy en día las informaciones policiales son muy escuetas. Y por otra parte quise llenar un vacío: no hay un libro en el país que hable de asesinas peruanas. Además, el género de la crónica me permitió plasmar tanto las emociones de las asesinas como de las víctimas y de las personas que rodeaban la situación. Esa es la ventaja de la crónica, que te permite contar y transmitir emociones con más nervio y con más fuerza.
C: ¿A qué se debe la pérdida de protagonismo de la crónica policial?
RMC: Se debe a tres factores fundamentales. El primero es que la noticia policial ingresa a la sección locales; ha desparecido la sección Crónica policial, ha perdido vigencia. Por otro lado, con el aumento de las nuevas tecnologías hoy en día las informaciones son más rápidas, más veloces, todo llega por internet; de manera que no hay muchos reporteros o periodistas especializados en crónica policial. Y, además, muchos periodistas no manejan expedientes legales, no manejan terminología legal. Por lo general tienen los reportes de la Dinincri y se quedan sólo con eso y el crimen queda sin ser investigado en su totalidad. Y otro aspecto importante es que muchos periódicos le dan mucha cabida al tema de espectáculos. La gente se ha vuelto inmune a ver muerte, lamentablemente.
C: ¿Cuál es la constante en las mujeres que matan?
RMC: La mayoría de las asesinas en el Perú son personas que no pudieron manejar su dolor, son personas que no pudieron manejar el desamor, el temor a perder dinero.
Hay algunas que no supieron vivir en pobreza. Y ese también es un aspecto importante que he querido tocar, sobre todo en los casos de provincias donde la policía no llega.
C: ¿Existen diferencias en la tipología homicida entre hombres y mujeres?
RMC: Sí, claro. Hay una diferencia desde el punto de vista de la modalidad del crimen y del manejo de las emociones. La mujer puede ocultar mucho más tiempo sus sentimientos de rencor; es más, puede ir almacenándolos poco a poco y llegar un momento en el que pueden planificar un crimen con más detalles que un hombre. La mujer, sobre todo en los casos de Lima, más sutil pero a la vez más cruel. El hombre mata de una manera rápida, violenta. La mujer busca en algunos casos agonía.
C: Un ejemplo de planificación es el de la mujer que en el año 1945, en el Cusco, cocina al hijo...
RMC: Ella planificó una cena con el esposo para vengarse de su abandono. Y mató a su bebé, lo descuartizó, lo cocinó y preparó toda una especie de ceremonia, un ritual en el que ella iba a disfrutar de cómo su esposo se comía a su propio hijo.
Dato
El libro se presenta este sábado a las 20.00 horas en el auditorio Chabuca Granda de la Feria del Libro Ricardo Palma, en Miraflores. Los comentarios estarán a cargo de José Güich y Manuel Eráusquin.