Un delicioso relato que nos introduce en las inquietantes aventuras y batallas que se libran en la intimidad, en aquellas conquistas no territoriales sino del corazón, donde los episodios de cortejo y de cama, las acciones previas y posteriores al amor, muestran el rostro embelesado, ardoroso, menos público, de Simón Bolívar. De todas las mujeres que pasaron por la vida del libertador, dejando profunda o ligera huella, aquí desfilan un puñado de damas que consiguieron alterar su encendido pecho: María Teresa Rodríguez del Toro, Adriana Ibáñez, Lucila Beltrán, Emilia de Pardo, entre otras, por medio de situaciones que remarcan la belleza y el embrujo de las faldas que ondearon en tiempos remotos, aparejados con la atracción irresistible de la carne. Escrito con lenguaje elegante, sobrio, mesurado, dentro del cual asoman atisbos de hilaridad, de cálida frescura, el presente texto no solo entretiene sino que devela los curiosos arcanos que Bolívar ocultaba bajo las sábanas.