"Cuando Darío Vásquez Saldaña me hizo llegar el original de El Tunchi enamorado, supe que tenía en mis manos un mundo tan rico que ya había percibido en las obras de Arturo Hernández, como en las de Francisco Izquierdo Ríos y otros autores selváticos, solo que ahora, los cuentos y los personajes, transportados en las alas de la ilusión y la fantasía, tenía destellos de credibilidad dentro de los imaginable. La técnica que usa Darío Vásquez, es una mezcla de anécdotas con vivencias cargadas de chispeante erotismo y picardía, expuestas con un lenguaje sencillo y coloquial." (Miguel Angel Sevillano Díaz)