En la senda de Víctor Andrés Belaunde, Espinosa Laña propone la construcción histórica del Perú como un encuentro de lo indígena y lo hispano, cuya resultante sería un pleno mestizaje cultural. La importancia del cristianismo, llegado con la Conquista, es destacada en ese aspecto e incluso colocada en el centro de la identidad nacional, a la que habría que entender bajo los conceptos de la inclusión y la integración. La fe y los principios evangélicos serían, entonces, un factor unificador, por no decir que constituyen, como quería Belaunde, el mismo núcleo de lo peruano. Serie: Historia y pensamiento político peruano.