Alejandro es un joven confundido y sin motivación alguna, hasta que encuentra en la escritura una forma de sobrevivir, y se obsesiona tanto con ella que en su afán de crear una novela, investiga, al estilo de Capote,  el misterioso asesinato en el que su primo Javier y su enamorada Amelia se han visto involucrados.
La novela va tejiendo, de esta forma, una trama paralela a la que Alejandro escribe. La idea de plasmar la realidad tal y como es lo lleva a cuestionar los límites de lo permisible en la búsqueda de la verdad. En medio de esto, las versiones que encuentra a su paso tienen leves diferencias, detalles que van cobrando relevancia conforme discurre la novela.
El mundo en el que vivimos es un libro que, mediante un relato eficaz y fluido, nos interna en las relaciones personales y sociales que se articulan en el fondo de la condición humana.