Sara Beatriz Guardia
Mariátegui y las mujeres: de bellezas a compañeras Mariátegui y las mujeres: de bellezas a compañeras

Por Gonzalo Pajares Cruzado
Fuente: Peru21, Lima 21/02/06

Mariátegui era un machista... cuando tenía catorce años. Como todo gran hombre, José Carlos Mariátegui era un digno representante de su tiempo, de sus bondades y carencias. Sin embargo, fue sobre todo un pensador con dotes de estadista, un ser humano que supo trascender sus circunstancias y convertirse en un adelantado, en un visionario. A esta conclusión ha llegado la escritora y periodista Sara Beatriz Guardia luego de hacer un cuidadoso estudio de los textos 'femeninos' de Mariátegui: desde su temprano inicio en La Prensa (cuando apenas era un adolescente) hasta los que escribió casi al borde de su lecho de muerte.
 
Prehistoria y vanguardia
 
Es sabido que Mariátegui no tuvo formación universitaria y que empezó muy joven en el oficio periodístico. Firmaba sus artículos con el seudónimo de 'Juan Croniqueur' y, como nos cuenta Sara Beatriz Guardia, sus primeros textos reflejan el pensamiento imperante en la época: machismo y jerarquización. El joven José Carlos era un esteta al que la delicadeza de las mujeres le seducía. Por ende, todo lo que perjudicase esa gracia natural le molestaba. Por ejemplo, le parecía poco femenina la intención de las mujeres por votar y ejercer una profesión liberal. Y así expresaba su opinión: "Las mujeres limeñas serán siempre deliciosamente inútiles y frívolas. Y así, también, serán siempre adorables".
 
¿Qué nos dice Sara Beatriz de estos textos? "Son escritos juveniles, adolescentes, de una etapa que el propio Mariátegui llamó su edad de piedra. Pero lo significativo es el pronto cambio que se produjo en este muchacho brillante. Esta 'evolución' es muy rápida pues, poco tiempo después, antes de irse a Europa en 1920, ya escribía a favor de los derechos de las mujeres".
 
Y es cierto: Mariátegui evoluciona en pensamiento y calidad literaria. Sus primeros artículos son, además de conservadores, retóricos. Sin duda por el apogeo que por esos días vivía el modernismo. Sin embargo, en 1924 era capaz de afirmar que uno de los acontecimientos más sustantivos del siglo XX consistía en "la adquisición de la mujer de los derechos políticos del hombre". Lo que nos indica que pronto se dio cuenta de que la posición subordinada de la mujer era injusta y poco coherente con el mundo de igualdad que promovía. 
 
 
Mujeres en Amauta
 
Mariátegui no solo se quedó en el discurso. Como relata Sara Beatriz Guardia, abrió las puertas de su revista Amauta a muchas mujeres y destacó su importancia en el nacimiento de la nueva literatura peruana, aquella que rompía con los atavismos de la época colonial. Una de estas figuras fue la poeta Magda Portal. Tanta fue su admiración literaria por Magda que la calificó como nuestra primera poetisa. "Antes solo hemos tenido mujeres de letras", señalaba.
 
Otras mujeres que encontraron en Amauta un espacio para escribir, publicar sus poemas, levantar su voz y hablar de libros, política y todo lo que les motivase fueron: Dora Mayer, Carmen Saco, Julia Codesido, María Wiesse, Ángela Ramos y muchas más. Sara Beatriz nos recuerda que la Confederación General de Trabajadores, que Mariátegui fundó, tuvo en su seno una comisión de la mujer, que era un lugar de debate y lucha por la mejora de su condición social.
 
Desde nuestra perspectiva, el trabajo de Guardia es valioso porque aborda una faceta no estudiada de Mariátegui: su visión de la condición de la mujer. Y, sobre todo, nos revela a un ser humano que supo escapar a las taras sociales que le tocó vivir. Un hombre, en fin, que pasó de la prehistoria a la modernidad en apenas cinco años.
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